Nuestros compañeros Laura y David nos regalan el relato de una actividad navideña.
El pasado 29 de diciembre y en plenas fechas navideñas nos escapamos para subir a Peñalara, nos aprovechamos de la abuela y le dejamos a la nieta una mañana (y ella encantada ehhh!!).
Siendo la montaña más alta de la Sierra de Guadarrama con 2.428m la ascensión comprende un desnivel de unos 600m, nosotros nos decidimos por un clásico: la ascensión por la canal central.
Partimos del Puerto de Cotos tempranito, para evitar la marabunta de Madrileños, y nos encaminamos hacia el circo, la nieve estaba un poco dura pero el paisaje merecía la pena.
Una vez en la Laguna Grande ya vimos el corredor.
Desde abajo se veía muy bien pero por su orientación la nieve estaba un poco blanda y como parece que habían pasado por allí unos miles de personas pues era como ir subiendo escalones.
Eso sí, si te salías de la huella te podías hundir hasta las rodillas.
El día fue espectacular además de disfrutar de un sol espléndido y unas vistas impresionantes.
Y al final de la mañana ya lo dice el refrán “cielo empedrado, suelo mojado” y así acabó el día, lloviendo.
Ahora si está bien el título. Lamento las disculpas y perdono las ausencias.
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